Entrevista a Sebastián Ruiz Rivas pintor y autor  de la exposición  «Destellos de la memoria».

Entrevista realizada por José Marcelo Ruiz

» AL CONTEMPLAR MIS OBRAS DESCUBRO QUE TRASMITEN BELLEZA Y ADEMÁS UNA INQUIETUD CONMOVEDORA»

PREGUNTA.- Hábleme usted  de la exposición Destellos de la memoria, que estará en el Centro de Arte Contemporáneo de Vélez- Málaga hasta el 15 de abril.  En ella hay un trabajo donde capta la luz que se cuela en los interiores: las casas,  los edificios. ¿Cómo surge esa necesidad y esa motivación?

RESPUESTA.- Esta exposición es una síntesis de mi dedicación al arte.  Observo la luz que se cuela  desde el exterior por las rendijas y sus distintos efectos lumínicos. Es una luz que se presenta siempre en movimiento, por lo tanto se transforma. Ello me motiva para estudiarla y buscar los  materiales para plasmarla; lo hago como un reto ante su dificultad, así como por su originalidad y el lenguaje metafórico que posee.    

P.- ¿Qué materiales emplea para plasmar las difracciones de la luz, y qué dificultades se les presentan?

R.- El objetivo es  plasmar  lo etéreo y el movimiento de la luz,  así como las sensaciones lumínicas que trasmiten; consiguiendo corporalidad orgánica. Los materiales empleados es  una mezcla mixta de óleo, acrílico, esmalte sintético y resina. Los instrumentos que utilizo  son: el aerógrafo, los espráis, y los pinceles para el fondo. En cuanto a las dificultades a las que me he enfrentado, en lo técnico con una actitud de tesón en la búsqueda de los resultados deseados. En el aspecto emocional me ha atraído esa mirada de la luz y sus cambios fugaces, a ello se ha unido mi estado anímico: me refiero a esas `sombras ocultas que tenemos en nuestra personalidad`, que gracias al arte se consigue superar, ser más feliz.

 P.- ¿Qué tendencias pictóricas ha seguido?

El trabajo artístico que hago sobre la difracción de la luz, donde   hay un lenguaje y se crea  una belleza.  Así como, emocionalmente, trato el tema del olvido, en el cual descubro una luz que se difumina y se oscurece al penetrar en las casas abandonadas, en esas sombras que se ocultan en la memoria perdida. No he encontrado autores que directamente lo traten. Pero ha sido mi mirada al arte plástico, a  pintores clásicos como: Velázquez, Rembrandt, pintores nórdicos… E incluso en el mundo de la arquitectura, los que me han  estimulado y les he estudiado para seguir esa tendencia pictórica, que sí, me han influenciado muchísimo.   

P.- ¿Qué  sensaciones  trasmiten su pintura?

Mis obras al contemplarlas, descubro que  trasmiten belleza. Pero, además, una inquietud conmovedora, al sentir cómo esa luz me mira y, a la vez, me interroga.

P.-  La exposición la denomina destellos de la memoria. ¿Qué significa  este concepto y a qué se refiere?

Toda motivación artística se inicia desde una búsqueda. Pero como decía Pablo Picasso: “lo que vale es lo que se encuentra en el acto creativo”. Lo que encuentro es la  necesidad  de humanizar mis obras. Ello me evoca añoranza, ir hacia mi  infancia y rescatar esa memoria del pasado. Es una memoria cargadas de sombras. Que se cuele ese rayo de luz hace desvanecer parte de la oscuridad, esto da esperanza y ánimo para proseguir. Destellos de la memoria significa  quedarse con esos recuerdos, que como luciérnagas iluminan en la noche; a sabiendas que caminan hacía el olvido.

P.- Hay una serie de obras que denomina Olvido, hábleme usted de ellas.

La serie del olvido comenzó ante la visión de  casas en ruinas y cómo el ramaje de plantas   las cubre,  y ver como la luz se matiza y tiene dificultad para penetrar. Esta imagen es una metáfora de la pérdida de memoria total. Me implica, de manera emocional, a pensar y estudiar ese estado de falta de identidad. Y, al contrario, de Destellos de la memoria, que es deseo de mantener latente los recuerdos. Para ello se recurre a dejar escrita la historia, mantener viva la cultura de los pueblos. En el olvido es el miedo a que lo verdaderamente humano desaparezca y muera. Esto es lo que pretendo dejar reflejado en mis obras.       

 P.- ¿Qué les diría usted a las personas para animarles a visitar su exposición?

 Les  digo que es una exposición que les hará reflexionar, porque son obras evocadoras que les van a conmover.  Aunque lo vean  de manera personal. Todos coincidirán que les invita a meditar sobre la vida.  

José Marcelo Ruiz

Esta entrevista se ha publicado en la prensa NOTICIAS 24 (Comarca de la Axarquía), el viernes, 25 de marzo de 2022. Mi agradeciminto personal al director del medio D. Francisco Gálvez por su interés por los temas: de cultura, de opinión y pensamiento.

OBRAS:

El lenguaje de las luciérnagas

Por José Marcelo Ruiz

Dedicado a Sebastián Ruiz Rivas, por la magia en su pintura

Sebastián Ruiz Rivas, autor de la exposición  Destellos de la memoria, que acoge el Centro de Arte Contemporáneo Francisco Hernández, Vélez- Málaga. En sus obras quiere capturar la luz fugaz que se cuela a través de las rendijas, en los interiores, en los recintos habitados por el hombre. El artista, al hacerlo  pretende materializar lo intangible… Os hablo de esa luz que está siempre en movimiento y camina hacia el infinito, y que se transforma en la huida que hace hacia el espacio cósmico; muriendo y naciendo cada instante ante la mirada contemplativa del ser humano, a quien visita. Cada instante es único e irrepetible en el espacio- temporal. Porque la `Nada´ creadora se regenera como energía vital para mostrarse.  Me refiero a ese `instante´, al  que  alude la poeta Marta Verdura Aguilar en su poemario Luciérnagas, cuando dice: “Hay que saber irse para poder nacer a lo desconocido. […] … Yallí estábamos, nuestras manos fundidas en ese instante lleno de bendiciones donde se detiene el palpitar de un corazón, se apaga el ruido, y se abrazan las esencias”.

Sebastián Ruiz, como ser sensible y soñador, se siente atraído por la magia de la luz y su lenguaje. Descubre y oye el lenguaje de las luciérnagas que iluminan los interiores…  Él clama a `Fantasía´ para pedir ayuda y corporiza ese instante de diálogo, así consigue anestesiar la mirada en  su pintura. Es una mirada que le interroga, porque ha dejado sus propias huellas. Que la principal función del arte es querer  trascender dejando las huellas humanas; así lo hizo el hombre de la caverna y lo continuará haciendo. Lo hace por necesidad de manifestarse y de búsqueda del conocimiento. Pretende materializar su memoria en el tiempo y dejarla como herencia, a sabiendas que los recuerdos se perderán en el olvido. Porque nació un día, pero no recuerda cómo fue. Jamás sabrá cuándo morirá, sólo sabe que camina hacia ella. Que vive atrapado en un espacio-temporal  de luces y sombras donde lo intangible se manifiesta.

El conjunto de obras que presenta y denomina Destello de la memoria aporta esa conciencia atávica que se hereda: los miedos…  Y sobre todo ese miedo al olvido, y con este tema  de Olvido nos muestra una serie de obras. En ellas, la mirada de la luz está perturbada, ocurre el suicidio de las luciérnagas. Ese miedo a la pérdida de la memoria y de la identidad que se adentra en esa `noche oscura del alma humana´, que nos interroga, pero ahora con preguntas que no sabemos responder.

 Sebastián Ruiz  quiere quedarse con aquellos recuerdos de infancia, añorarlos. Me confiesa que el arte le ayuda mucho a derribar esas `sombras perturbadoras´ que están muy dentro. Ello le hace ser un hombre realizado y feliz. Recuerda  que  siendo un niño asistió a una semana cultural y descubrió la obra Las Meninas  de Velázquez, de ella le llamó la atención la luz que se colaba por la puerta que aparece en el fondo del cuadro, por donde entra un hombre. Desde aquel día se le despertó la inquietud por la pintura, y el arte lo siente, lo vive como realización personal. Enhorabuena, Sebastián, por tu trabajo, tu dedicación y compromiso.

José Marcelo Ruiz

Este artículo se ha publicado en la prensa NOTICIAS 24 (Comarca de la Axarquía), el viernes, 25 de marzo de 2022. Mi agradecimiento personal al director del medio D. Francisco Gálvez por su interés por los temas: de cultura, de pensamiento y opinión.